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¿Sientes que le faltan calidad a los textos que lees? ¿O tal vez crees que tus artículos necesitan un impulso para mejorar? En cualquiera de los casos, la corrección de estilo puede ser un proceso necesario para mejorar la calidad de cada una de tus palabras, sin afectar tu propio sello como autor.

En este artículo, te explicaremos en qué consiste este proceso. Además, sabrás por qué es importante y quiénes son los que se dedican a ello.

¿Qué es la corrección de estilo y por qué es importante?

¿Tu trabajo está relacionado con la escritura? Entonces tal vez te interese mejorar la calidad final de tus textos. Sin embargo, la realidad es que una persona tiene un límite de mejora. Sin importar qué tan bueno seas con las palabras, llegará un punto en el que no podrás optimizar más tus resultados.

¿Sabes por qué sucede esto? Simple: porque necesitas una segunda e incluso tercera visión sobre tus artículos. Esto es lo que sucede en los grandes medios de comunicación o las plataformas para escribir. Antes de publicar un texto, este pasa por filtros de distintas personas que buscan fallos (EHow, 2021).

Pero eso no es todo: aunque no existan errores, se planifican alternativas sobre la redacción y estilo del texto. Sin afectar la propia esencia del autor, hay ocasiones en las que ciertas ideas se pueden expresar de una mejor manera. Incluso puede suceder que algunas formas no encajen con la línea editorial.

Allí es donde la corrección de estilo se vuelve importante. Básicamente, se trata del proceso que se encarga de embellecer una obra sin modificar sustancialmente su contenido. Es decir, radica en la posibilidad de generar comentarios o sugerencias para que el texto sea aún más valioso.

La corrección de estilo no significa que un texto sea malo o tenga errores importantes. Esta modificación de fallos se realiza en un proceso inicial (edición) a cargo de un editor. Luego, desde la corrección se proponen cambios estilísticos que no afectan el sello personal del autor (Hablando de Letras, 2020).

¿Qué criterios se tienen en cuenta y cómo puede variar el proceso?

Justamente, la corrección de estilo debería ser una etapa aparte de la edición inicial, pues se trata del filtro final antes de la publicación. Si en la primera fase se valida o no la calidad de un texto, en esta segunda se planifican las sugerencias para que este cobre un valor más importante. Por eso, existen dos maneras de plantear la corrección de estilo (Crehana, 2021):

  • Modificaciones. En este caso, el corrector realiza directamente las modificaciones por su cuenta para adaptarlo a su propio criterio o el del sitio web donde se publicará. No siempre el redactor se entera de los cambios que se han implementado.
  • Sugerencias. Aquí, en cambio, el corrector asume que sus comentarios son subjetivos. En consecuencia, plantea posibles cambios para que el redactor decida si son convenientes o no.

A su vez, se pueden evaluar los siguientes parámetros (Pleca, 2019):

  • Sintaxis y ortografía. Como hemos comentado, puede combinarse con el proceso de edición de calidad inicial. No obstante, en la propia corrección de estilo se pueden hacer modificaciones y sugerencias para que la calidad sea todavía superior. Por ejemplo, con ciertas palabras que no expresan adecuadamente una idea o determinadas oraciones que podrían plantearse de una mejor forma.
  • Terminología. Esto suele aparecer en artículos técnicos, como los médicos. También en aquellos que suelen incorporar modismos o palabras incorporadas de otra lengua. En esos casos, el profesional corregirá al redactor para que sus palabras tengan más impacto.
  • Ideología. También puede suceder que un texto tenga un determinado posicionamiento ideológico controversial, confuso o que no encaje con lo que busca una línea editorial. En consecuencia, pueden implementarse sugerencias o modificaciones específicas.

¿Quiénes son las personas que se encargan de esta tarea?

Ahora, seguramente quieres saber quiénes se encargan de la corrección de estilo. Pues bien, la respuesta es bastante amplia, ya que varias personas pueden implementar esta tarea. A saber (Crehana, 2021):

  • Comunicadores o profesionales lingüísticos. Es decir, personas que sepan cómo sacarle jugo a cada una de tus palabras. Los primeros suelen enfocarse más en encontrar la mejor forma de comunicar una idea según el objetivo. En cambio, los segundos sugieren nuevas formas sintácticas y gramaticales para que el texto sea mejor.
  • Traductores o nativos de un idioma. En estos casos, se busca a una persona que sepa sobre una lengua específica. Por ejemplo, si tienes que redactar un artículo en inglés, siempre habrá una persona que realice proofreading. Es decir, una corrección para asegurarse de que cada palabra esté colocada correctamente.
  • Especialistas de una determinada área. Por último, en ciertos rubros técnicos es probable que la revisión esté a cargo de una persona especializada. Un ejemplo claro se da con la programación. Si el redactor no se dedica a eso, posiblemente un especialista deba hacer aclaraciones. Incluso puede generar sugerencias para garantizar la calidad final del texto.

Ahora sabes qué es la corrección de estilo y por qué es fundamental para mejorar tus trabajos. ¡Impulsa tus textos con la revisión adecuada y lograrás un impacto en tu público!

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