¿Eres de aquellos que están planeando crear un blog o rediseñar aquel que ya tienes para lograr que tu estrategia de content marketing sea un éxito? Los manuales de estilo son esa brújula que te orienta para encaminarte hacia tus objetivos.
De acuerdo con EcommerceBonsai, el 85% de los consumidores busca tener una experiencia coherente con la marca en todos los puntos de contacto. Esto significa que sí importa la forma en que te comunicas, y, sobre todo, que necesita ser consistente en todos los canales.
El mundo digital evoluciona y se transforma en un abrir y cerrar de ojos. Así que no es descabellado mencionar que las marcas crean constantemente nuevas páginas web y perfiles en redes sociales con el objetivo de posicionarse, dar a conocer sus productos o servicios e incrementar sus ventas.
Aunque los manuales de estilo están ausentes en la mayoría de las marcas, consideramos que es fundamental elaborarlos antes de empezar cualquier proyecto de contenidos.
Por lo tanto, no sobra afirmar que es necesario el plan de marketing correcto y la estructuración de estos manuales que incentiven una oportuna comunicación entre tus clientes y lo que les estás ofreciendo.
¿Qué son los manuales de estilo y qué información deben incluir?
Una guía de estilo recoge criterios, pautas y normas para la redacción, diseño y presentación de documentos o contenidos en diferentes medios, con el objetivo de unificar y estandarizar la forma en que se comunica un mensaje. No es simplemente un tratado gramatical, sino una herramienta que favorece la coherencia, identidad y claridad en la publicación, facilitando tanto la producción como la lectura y comprensión del contenido.
Todos los manuales de calidad abren con una introducción que guía a tus clientes o buyer persona. Pero ¿y después? ¿Qué partes debe incluir para tener consistencia y orientar al lector, tanto en el formato como en la redacción de sus contenidos? A continuación, veámoslo en detalle.
Normas lingüísticas y de redacción
La corrección gramatical, la voz y el wording (o los términos preferidos de tu marca) están entre los principales aspectos que aborda una guía de estilo. Así, el documento debe despejar las dudas con respecto a la ortografía, términos a evitar, puntuación, entre otros aspectos.
Además, en esta parte de los manuales de estilo será donde se define tu audiencia. Es necesario saber a quién te diriges; partiendo de esta premisa, variarás tus contenidos y hasta el tono.
H3: Aspectos gráficos y de diseño
Por otra parte, ten en cuenta que tu marca es distinta y se diferenciará de otras gracias a lo que le presentas a tus clientes. En este sentido, debes tener claros los tipos de contenido, formato visual y diseño, y hacerlos parte de tu estrategia. Aquí debes incluir, por ejemplo, la gama de colores, distribución visual de la información, tipografía y logos de tu marca. Es importante que el aspecto gráfico mantenga cierta homogeneidad en todos tus canales.
Procedimientos y formatos específicos
En este apartado, debes plantear y dejar claro el uso de los subtítulos, de negritas, tamaño de letra y tipografía. Lo anterior es importante en los manuales de estilo porque da uniformidad y mejora la presentación de tu sitio web. También es posible incluir orientaciones específicas para la comunicación, navegabilidad y usabilidad en distintos soportes, como móviles o PC.
H3: Uso de citas, referencias y bibliografía
La información que presentes debe estar sustentada por fuentes confiables. Basarte en ellas es esencial para crear contenido de calidad. Por eso, debes incluir directrices sobre el sistema de citación y uso de referencias bibliográficas en tu guía de estilo. Adicionalmente, hacerlo mejora el posicionamiento de tus contenidos en Google y otros buscadores.
Lineamientos SEO en los manuales de estilo
Por último (pero no menos importante), están los requerimientos SEO o de optimización en motores de búsqueda. Cumplir con estos requisitos te ayuda a aumentar la visibilidad de tu contenido en Internet.
Al definir tu estrategia de SEO, debes ofrecer indicaciones sobre aspectos que influyen en el posicionamiento de los buscadores, como:
- Palabras clave o keywords.
- Redacción de títulos y subtítulos.
- Desarrollo de metaetiquetas.
- Enlaces a otras páginas web.
- Legibilidad de las oraciones.
En resumen, incluir estos lineamientos SEO asegura que todo el contenido producido esté optimizado desde su creación. Como resultado, se potencia la visibilidad de la marca en los motores de búsqueda de manera consistente.
¿Por qué los manuales de estilo son tan importantes?
Estas guías señalan el norte a las marcas, entidades y organizaciones que quieren comunicar algo, para indicarles cómo hacerlo bien. Sin embargo, no solo postulan reglas. Antes bien, aseguran coherencia, transmiten confianza y facilitan que todos hablen con la misma voz, sin importar el canal o el formato.
Homogeneiza el contenido y da identidad
Cuando cada una de tus piezas de comunicación sigue las mismas pautas, moldeas una identidad reconocible y consistente. Por consiguiente, logras que el público asocie ciertos colores, palabras o estilos visuales con tu marca de inmediato. De esta manera consigues reforzar su personalidad y presencia.
Facilita la edición y revisión de textos
Contar con criterios claros ahorra tiempo y discusiones al momento de editar. En lugar de decidir cada vez cómo escribir una palabra o estructurar un párrafo, los manuales de estilo establecen la norma y simplifican el trabajo de quienes producen y revisan contenidos.
H3: Mejora la experiencia del usuario o lector
Los textos que mantienen un estilo uniforme resultan más fáciles de leer y comprender. Al eliminar inconsistencias y confusiones, el lector recibe la información de forma fluida. A su vez, esto genera confianza y mejora la relación con la marca o institución.
Asegura una comunicación clara y profesional
Seguir los lineamientos de los manuales proyecta seriedad y cuidado en cada detalle. ¿El resultado? Evitas errores y contradicciones, mientras transmites la imagen de una organización profesional, que sabe lo que quiere comunicar y cómo hacerlo bien.
Tipos comunes de manuales de estilo
¿Sabías que existen diferentes tipos de guías de estilo? Cada uno de ellos está pensado para diversas organizaciones y/o dependiendo del contenido que se desee comunicar. En este apartado, pasamos revista a los más comunes y te mostramos algunos ejemplos prácticos:
Manuales para redacción periodística y editorial
Existen otros tipos de manuales de estilo orientados a otros campos como el periodístico. Es el caso del manual creado por el diario El País, el cual presenta distintos lineamientos en cuanto a los fundamentos del periódico y el correcto uso de la información. Asimismo, brinda precisiones sobre aspectos ortográficos y de estilo.
A su vez, las editoriales que publican libros y otros materiales se rigen por manuales de estilo propios. Por ejemplo, la Editorial Formación Alcalá, de España, ofrece un compendio de normas editoriales para los autores que deciden presentar sus originales.
Manuales de identidad visual o gráfico
Estas son guías que definen cómo debe representarse una marca en cualquier soporte. Incluyen elementos gráficos como el logotipo, paleta de colores, tipografías, iconografía, tono visual y aplicaciones en distintos formatos. Los manuales de identidad visual buscan que la marca sea fácilmente reconocible sin importar el medio en que aparezca.
Este es el caso de las guías de diseño de Spotify, que ayudan a los creadores de pódcasts y otros contenidos a asegurar que sus piezas se alineen con la personalidad visual de la marca.
Guías institucionales y académicas
Tal vez no lo sabías, pero instituciones académicas prestigiosas elaboran manuales de estilo para las comunicaciones en sus canales oficiales. Es el caso, por ejemplo, de la Universidad de Cambridge. Asimismo, otro caso que vale la pena conocer es el manual de la Cruz Roja Española. La reconocida entidad ha puesto a disposición una guía de estilo para quienes deciden trabajar con ella.
Los manuales de estilo, una clave para la calidad comunicativa
Las guías de estilo cumplen con un objetivo simple pero poderoso: unificar la forma de comunicar de tu marca, tanto visual como verbalmente. Definen desde la elección de palabras hasta la presentación de los contenidos, asegurando que cada mensaje refleje su personalidad. En consecuencia, evitan interpretaciones ambiguas y garantizan que todos los equipos trabajen bajo el mismo propósito.
Por otra parte, los manuales de estilo facilitan la adaptación a diferentes plataformas y formatos sin perder coherencia. Por ejemplo, para publicaciones en redes sociales, documentos internos o material impreso de tu marca. Con todo, un buen manual hace que cada pieza luzca profesional, consistente y alineada con la identidad de tu empresa.
Incluso, este tipo de manuales puede ser útil para ayudarte a crear la historia de tu marca. McGowan, periodista que entrenó en comunicación a líderes globales, señala desde Infobae que crear una narrativa coherente para tu marca aumenta hasta 22 veces su retención en la memoria.
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