El objetivo de todo sitio web, además de cumplir con su propósito de visibilidad, tráfico y venta, según sea el caso, es aparecer primero en Google . Con esta consola virtual puedes obtener un panorama general sobre datos importantes de tu sitio web. Entre las métricas más importantes están las que guardan estrecha relación con el rendimiento de búsqueda y también con la experiencia de los usuarios.
Todo esto sirve como soporte para editores SEO, programadores y creadores de contenido porque es una guía que genera alertas. Además, ofrece recomendaciones directas para ejecutar cualquier acción que coadyuve a mejorar la salud del sitio web. Por ende, se pueden generar más visitas, tráfico, interacciones y conversiones.
Google Search Console avisa cuando surgen problemas con la seguridad de un sitio web como, por ejemplo, vulnerabilidades ante hackers o piratería. También ofrece información que ayuda a determinar si el equipo de calidad de búsqueda ha impuesto algún tipo de sanción de acción manual.
Esta herramienta, junto a Google Data Studio , les permite a los creadores de las páginas medir el rendimiento, seguridad, posicionamiento y ofrece estadísticas de suma utilidad para la optimización de sitios webs.
Supervisa y controla el rastreo e indexación. Ayuda a identificar y a corregir los errores que se presenten. Proporciona una visión panorámica del rendimiento de la búsqueda. Pide la indexación de páginas webs que estén actualizadas. Revisa los enlaces internos y externos. Google Search Console no es una herramienta requerida para clasificar mejor una página web y tampoco es un elemento de clasificación. No obstante, su utilidad se evidencia en optimizar el tráfico de una página y el rendimiento de las búsquedas, por lo que es un recurso invaluable e indispensable.
El primer paso que se debe dar para comenzar a usar esta plataforma es verificar y autenticar la propiedad de la web. Para ello, Google ofrece varios métodos de verificación.
Los dominios que han sido registrados con Google se verifican de manera automática al analizarlos o añadirlos a Google Search Console. Existen cuatro maneras básicas para que los usuarios hagan la verificación de sus sitios:
Cargando archivos HTML. A través de la etiqueta meta. Con el código de seguimiento que proporciona la herramienta Google Analytics. Usando Google Tag Manager. Diversas plataformas de alojamiento de páginas web ponen límites sobre lo que permiten subir y se necesita una manera determinada de verificar la propiedad de tales sitios virtuales. No obstante, esto ya no resulta tan problemático porque cada vez más servicios de alojamiento de sitios poseen métodos de verificación que son fáciles de seguir.
Existe dos maneras diferentes, pero estándares, para hacer la verificación de la propiedad de un sitio web hecho en WordPress:
Mediante la carga de los archivos HTML. A través de la etiqueta Meta. Cuando se hace la verificación de un sitio web utilizando alguno de las dos modalidades mencionadas, se elige el proceso para establecer las propiedades del prefijo de la URL.
No hay que temer con eso de “ las propiedades del prefijo de la URL” , en realidad, completar o verificar un sitio usando Google es sencillo.
Ir a Search Console y abrir el menú desplegable que está en el selector de propiedades. Este se halla ubicado en la esquina superior izquierda. Dentro de la ventana emergente que tiene por nombre “Seleccionar tipo de propiedad” hay que introducir la URL del sitio web y, finalmente, se debe hacer clic en “Continuar”. Seleccionar la modalidad o el método para cargar los archivos HTML y, a continuación, se debe descargar el archivo HTML en cuestión. Subir el archivo HTML a la raíz o centro del sitio web. Para culminar el proceso de verificación se tiene que pulsar la opción “Verificar” en Google Search Console. Los resultados arrojados en la búsqueda y su clasificación van a depender de la capacidad que tiene Google para rastrear e indexar los sitios webs.
Para esto, la herramienta para inspección de URL usada por Search Console avisa sobre todo tipo de problemas al hacer el rastreo y la indexación. Afortunadamente, la advertencia se produce antes de que el problema pase a mayores. Es decir, evita que las páginas desaparezcan de los resultados de búsqueda.
La herramienta para la inspección de URL da a conocer si una URL está o no indexada. También muestra si es elegible para aparecer en los resultados de las búsquedas.
Para inspeccionar cada URL que es enviada, el usuario debe:
Requerir la indexación de una web que haya sido actualizada últimamente. Observar cómo descubrió Google el sitio web a través de los mapas de sitio y las webs internas que sirven de referencia. Verificar la última fecha en la que se hizo el rastreo de la URL. Comprobar si Google usa una URL conforme y declarada o si usa una diferente. Verificar la capacidad de usabilidad para móvil. Verificar las mejoras como, por ejemplo, las migas de pan. Blogueros, dueños de tiendas online, empresas con sitios webs de referencia y otros más deben apoyarse en Google Search Console . En definitiva, es la mejor ventana de monitoreo y gestión para mantener con buena salud una página web. No solo se trata de lograr un buen posicionamiento, sino de mantenerlo en el tiempo, por lo que es muy importante cuidar la velocidad (tiempo de descarga), experiencia de navegabilidad, estructura de URL, entre otros aspectos, que deben estar en perfecto funcionamiento. Todo ello se traduce en un alto tráfico de visitas a la web, así como constantes interacciones y las mejores conversiones.
