Si te preguntan para qué sirve la coma, lo más factible es que digas que es una herramienta de la escritura para hacer pausas moderadas en el texto. Y ello será cierto, pero incompleto. Quizá, si observas este párrafo, notarás que su función más importante es mucho más sutil y, a su vez, más relevante, para organizarlo.

Bondades y cuidados que implica el uso de la coma en la escritura.

El plan original de la coma: organizar la escritura

La coma regula el sentido que tendrá el texto a escribir. Esto, sin embargo, no debe entenderse como una pauta auditiva o visual para organizarlo, sino como una declaración de intenciones para el texto mismo.

Veamos un ejemplo en el siguiente texto:

No dije nada pendejo.

La persona que se expresa en esta oración afirma no haber empleado expresiones pendejas en un momento determinado.

No dije nada, pendejo.

Quien se expresa en esta oración, por otra parte, afirma no haberse expresado en absoluto y de paso, se refiere de manera negativa a un interlocutor o a un tercero ausente. Puede verse que la única diferencia visible entre ambas expresiones es la coma. Sin embargo, cada una tiene un significado y una connotación muy distinta de la otra.

¿Cómo saber entonces cuando escribir la coma y cuando prescindir en la escritura de ella?

Casos en los que se recomienda escribir la coma en la buena escritura

1. Acotaciones, incisos o interrupciones explicativas

En el desarrollo de contenidos una idea a veces es necesario insertar información adicional, que profundice en sus detalles, sin restarle fluidez a su desarrollo. La expresión subrayada es un ejemplo de inciso.

2. Interjecciones

Como estas son palabras o expresiones que al exclamarse («¡!») expresan por sí solas un estado de ánimo, se les suele separar del texto que les sigue o del que les precede. (¡Fácil!, ¿no?).

3. Separación de elementos gramaticales equivalentes

Si en una expresión hay muchas palabras que pertenezcan a una misma categoría gramatical o muchas oraciones cuyo centro sea una sola categoría: “muchos sustantivos, muchos adjetivos, muchos verbos”.

4. Marcación de vocativos en la escritura

Los vocativos son llamados de atención o invocaciones de sujetos que al no separarse, se pierden: “Este es un uso indispensable de la coma, mi querido lector”.

5. Reemplazo de verbos

Este uso de la coma permite evitar reiteraciones: “Deberías escribir ejemplos propios para estos casos, así como para los del próximo apartado”. El verbo subrayado se ausentó con total discreción.

6. Marcación de oraciones condicionales en la escritura

Las oraciones condicionales son las que tienen la forma “Sí […], entonces […]» o una parecida y enuncian que algo está condicionado a otra cosa: “Siempre que tu expresión indique algún condicionamiento, usa la coma”.

7. Señal de subordinación o afectación general

Este caso es interesante, omite expresiones de causalidad cuando es posible deducirlas; la oración anterior es un buen ejemplo de ello.

8. Diferenciación entre fechas y lugares

Por ejemplo, “Macondo, 5 de diciembre de 1928”.

9. Precedente de un “que” explicativo o especificador

Por lo general, las expresiones en la escritura que incluyen a un “que” no llevan coma. Su excepción es aquel que brinda más información, que explica o detalla parte de la idea, como se ve en la oración anterior.

10. Pausas de pronunciación ascendente

En caso de que tengas dudas y estos ejemplos te resulten insuficientes, prueba a leer en voz alta lo que has escrito. Cada vez que entre una palabra y otra hagas una pausa en la que el volumen se eleva un poco, escribe una coma.

Casos en los que se recomienda prescindir de la coma en la escritura

1.  Separación entre sujetos y predicados

Recuerda que el sujeto es el agente de una acción que se predica en una oración. Si los separas, esta pierde sentido. “Este caso, se entiende mejor con el ejemplo”.

2. Separación entre verbos y complementos

De manera asociada al caso anterior, en este caso lo importante es evitar que se pierda información al separar a un verbo de su complemento. De nuevo “Este caso se entiende, mejor con el ejemplo”.

3. Pausas de pronunciación descendente

En relación con la lectura en voz alta, si haces una pausa en la que se baja un poco el volumen de tu voz, señálala con punto seguido.

Si quieres profundizar en el uso de la coma en la escritura, acude a «El buen uso del español», publicado por la RAE. Así mismo te recomendamos leer este texto que habla de ¨Rrecomendaciones de buenos escritores sobre la escritura¨. No olvides la importancia de las normas APA en cualquier texto que elabores.

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